Banderaló (15/1/18)- Si bien se notó que hubo menos público que en la primera noche, a pesar del frío y otras propuestas en el partido de General Villegas, el circuito volvió a colmarse de gente.
El carnaval sigue siendo la fiesta más convocante, así quedó demostrado una vez mas.
La noche clausura presentó un programa distinto a la noche anterior. Las atracciones mecánicas ganaron la calle y las mascaritas (sobrevivientes de los carnavales de siempre) despertaron curiosidad y risas. Volvieron a brillar Filos do Acapu, Los Poco Pique e Ipané, la batucada local que tuvo a su cargo el cierre del desfile. Ritmo Latino, con 60 bailarinas, llenó de color, ritmo y alegría todo el recorrido, una puesta de la profe Griselda Bruña que un año más estuvo a las alturas de las circunstancias.
Dos carros musicales, uno de ellos con un homenaje a Miguel Conejito Alejandro y el otro con Sergio Gastón, cantante local.
Las máscaras sueltas que concursaron alcanzaron un nivel que superó ampliamente a años anteriores en calidad y cantidad.
Desde General Pico llegó Nuevos batuqueros, con las atracciones mecánicas El Tobiano y el Citro Loco además de Edward, el hombre más pequeño del mundo, multipremiado en diferentes carnavales importantes del país.
La quema del Rey Momo enterró el carnaval banderolense, que este año, por suerte, tuvo dos noches memorables como para sacarse la mufa del año anterior cuando el clima alteró la fiesta y para corroborar que el carnaval está más vigente que nunca.
AGRADECEMOS LA PRODUCCIÓN FOTOGRAFICA A HUGO BARONIO, DE RED INFORMATICA.