Allá por el año 1995 las escuelas primaria y secundaria elaboraron un proyecto cuyo objetivo era tener un espacio propio donde los alumnos pudieran realizar sus actividades tanto en las clases de Educación Física como las que practica el CEF Nº 52 Anexo Banderaló.
Hasta hoy los alumnos realizan sus prácticas deportivas al aire libre.
Lo cierto es que el proyecto tuvo eco en el municipio que estaba siendo, ya, administrada por el Dr. Gilberto Alegre quien había asumido como intendente en 1995.
El 25 de abril de 1997 la Municipalidad de General Villegas compra un terreno en la intersección de calles Facundo Larrosa e Ing. White ubicado catastralmente en la Circ. 6 Sección de Manzana 14 Parcela 1 destinado a la construcción de un gimnasio. La ilusión de los banderolenses comenzaba a recorrer un camino nada fácil de transitar.
Tuvieron que pasar seis años para que se hiciera el replanteo de la obra, hecho que ocurrió entre julio y agosto de 2003. En julio de ese mismo año comienzan a cavarse los pozos para las columnas, trabajo que realizó José Luis Zuñiga, empleado, por aquella época, de la firma José y Pedro Aicardi Construcciones.
Entre julio y agosto, entonces, la firma Héctor G. Vaira, de la ciudad de 9 de Julio, coloca el tinglado y las columnas iniciando formalmente la obra del gimnasio.
Dos años más tarde, en julio de 2005 se coloca el piso de hormigón armado a cargo de la firma Zomaco SRL de la ciudad de Lincoln.
Sin embargo, ese impulso fue solo una ilusión puesto que la obra volvió a paralizarse hasta el año 2009 cuando comienzan a levantarse las paredes exteriores, trabajo a cargo de Juan Carlos Comba.
En el 2010, se completan las paredes hasta el techo, ahora los trabajos a cargo de Pedro y José Aicardi Construcciones. En el 2011 se llenan las columnas de 12 bases y 12 pilotes hasta la línea de fundación, levantan paredes de lo que serán el depósito, la oficina y la cocina. En el 2013 se realiza la primera etapa de la parrilla sin la chimenea.
El edificio, que tiene 1300 m2 de los cuales el sector de gimnasio ocupa 800m2, vuelve a paralizarse habiéndose concretado el 50% de su construcción. Ya habían pasado 10 años.
Para las elecciones del 2015 el gimnasio se convirtió en un referente de promesas tanto por parte del oficialismo como de la oposición.
El Dr. Eduardo Campana gana las elecciones en una votación histórica y es así que las expectativas sobre este tema vuelven a insertarse en la sociedad, sobre todo porque había sido una promesa de campaña.
Esa promesa comienza a proyectarse cuando a partir del año 2016 se reanudan las tareas que ya no se detienen sino hasta el final de obra.
En este contexto la obra se reactivó y se empezó a trabajar en los revoques interiores, la carpintería, revestimiento exterior, veredas, cielorraso, conexión eléctrica, sanitarios, parrilla, oficina, pisos, pintura interior y exterior y otros detalles de finalización de obra. De acuerdo a dichos por el Secretario de Obras Públicas, Arq. Daniel Cepa, la obra se concluyó utilizando el Fondo Educativo que es un presupuesto destinado a la infraestructura educativa de un distrito. En esta etapa participan distintos actores especializados en diferentes ramas de la construcción.
Banderaló finalmente tiene su gimnasio. Entendamos el momento histórico y vivámoslo como tal.