Transcribimos textualmente lo que posteó en su FB:
"En el año 2015, muchos habitantes del Partido de General Villegas, pedían un cambio.
El cambio que reclamaban se enfocaba en dos puntos: el reemplazo de los gobernantes locales, que llevaban 20 años en el poder, y arrastraban el desgaste natural e inevitable que ocasiona el ejercicio ininterrumpido de la función pública durante tanto tiempo; y la necesidad de impulsar nuevas políticas municipales que modernizaran la administración del gobierno en las distintas comunidades.-
Con la victoria de Cambiemos en octubre de 2015, amplios sectores de las comunidades villeguenses, celebraron el comienzo de una nueva etapa en la historia regional.-
Las expectativas que el cambio naciente generaba, se vieron fortalecidas por la alineación política del municipio, en sintonía con el gobierno provincial y nacional.-
Con la llegada de un nuevo partido político al gobierno municipal, se concretaba la alternancia en el poder; esencia misma del sistema democrático en que vivimos.-
En ese marco, se esperaba un cambio radical en todos los órdenes; un período de anheladas transformaciones, largamente reclamadas por muchos.-
Pero alternancia y cambio, no significan lo mismo:
Alternancia, es la acción de sustituir un partido político por otro, sin que ello signifique necesariamente una transformación;
El cambio, se define como la acción de pasar de un modo de ser a otro, o en este caso, de un modo de gobernar a otro distinto.-
Es decir que la alternancia, por si sola, no significa un cambio.-
Hasta hoy vemos que en el Partido de General Villegas, solo hemos cambiado de gobernantes, estando aún pendiente, el verdadero CAMBIO: la adopción de nuevas políticas públicas, necesarias para dar respuesta a los actuales requerimientos de las comunidades.-
En ese sentido, nos preguntamos: ¿Qué ha sucedido con las transformaciones prometidas en la campaña electoral que proclamó intendente al Dr. Eduardo Campana?
Veamos:
- Aun cuando se dice apoyar la salud pública, se observa un grave deterioro en las prestaciones del hospital municipal y centros de salud de las localidades.-
- Aun cuando se trabaja para resolver las penurias y calamidades que aquejan a diversos sectores sociales de nuestra comunidad, las políticas del gobierno son burocráticas, lentas e insuficientes, yendo detrás de los problemas y no previniéndolos , como debe ser.-
- Aun cuando se ha sostenido la decisión de privilegiar el desarrollo de los pueblos del Partido, se los ha condenado a un abandono nunca visto.-
-Aun cuando se pregona la necesidad de propiciar un mayor diálogo con quienes se dice representar, se rechaza recibir a un grupo de vecinos autoconvocados por las inundaciones y el abandono estatal.-
- Aun cuando se dice fomentar una mayor participación ciudadana, no se ha impulsado la elección vecinal de los delegados municipales en los pueblos, como se prometió.-
Por qué no adherir a la experiencia llevada a cabo en municipios vecinos de la Provincia de Buenos Aires, como Junín, Chacabuco, Pergamino, Lincoln, Nueve de Julio, Bragado, Olavarría, Bahía Blanca, entre otros, muchos de su misma agrupación política, que han posibilitado a sus pueblos, la elección de los delegados municipales.-
No se puede pretender que consideremos como promesa cumplida, la designación de delegados, elegidos a dedo, sin consulta a los vecinos de cada localidad, sin mínimas atribuciones, y sin recursos que administrar para cubrir necesidades básicas.-
- Aun cuando se prometió en la campaña electoral, no se ha impulsado la utilización del presupuesto participativo como instrumento financiero, para dar a los pueblos del Partido, mayor participación, decisión y control, en el uso de sus recursos económicos.-
- Aun cuando se declama transparencia en el manejo de los dineros públicos, no se publican los sueldos de los funcionarios jerárquicos, como propicia la gobernadora provincial mediante el programa “gobierno abierto”, vigente en varios municipios, para el control vecinal.-
- Aun cuando se proclama ética en el ejercicio de la función pública, se hace uso arbitrario de los cargos públicos, nombrando amigos, hijos y familiares de los funcionarios políticos.-
La inobservancia de aquellos compromisos asumidos cuando se buscaba el apoyo vecinal necesario para llegar al gobierno, por quienes se presentaban como “el cambio”, daña la credibilidad de la gente, genera rechazo, y la aleja de sus representantes políticos.-
Por eso, considero que el gobierno municipal debe revisar su rumbo, honrar sus promesas de campaña, y observar sus obligaciones éticas y políticas, para devolver a los habitantes de nuestro partido la esperanza de alcanzar el cambio deseado.-
Para que la política no vuelva a defraudar al pueblo.-
Para que el cambio, no se convierta en decepción…"
