“Estoy sentada en mi habitación una vez más. La misma habitación que siempre he conocido. Han pasado 10 meses y pareciera que el tiempo se quedó quieto. La gente me pregunta cómo me fue y la verdad es que nunca sé que responder. ¿Cómo puedo resumir un año entero en tan solo una corta respuesta? Todos han seguido con sus vidas, pero al mismo tiempo todo parece seguir igual. Mientras tanto, mi interior grita. Tratando de encontrar una manera de expresar que ya no soy igual. Ya no soy la misma cautelosa y asustada persona que se fue hace unos meses. He regresado sabiendo quien soy. Ya no tengo miedo de lo desconocido, en todo caso, busco cualquier oportunidad para adentrarme en él. Pero, ¿cómo puedo explicar todos estos cambios sin sonar arrogante o egocéntrica? Es algo que muchos creen entender pero que solo pocos han logrado vivir.” (Pensamientos de un estudiante de intercambio que regresó a casa)
Tal vez sean estas mismas palabras las que ella quisiera decir. Tal vez por sentirse plenamente identificada con el texto lo publicó en su página de Facebook. Es que Guillermina Gorgerino, joven banderolense de 19 años que se animó a desafiarse a sí misma, termina de llegar de regreso a Argentina, a Banderaló, luego de haber vivido un año de intercambio estudiando en Alemania.
Hablamos con ella, para saber detalles de su experiencia.
- Guillermina, ¿cómo surgió la idea de realizar el intercambio?
Siempre está presente en mí la idea de viajar y me acercaron un folleto de programas de intercambio de AFS (American Fields Service) y me puse en contacto
- ¿Cuál fue el lugar elegido y por qué?
Mi sueño era irme a Finlandia, pero no me convenía la fecha de partida, por lo tanto elegí Alemania. Lo elegí por ser un país con buena cultura, organización y seguridad. Además quería conocer Europa y aprender un nuevo idioma.
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Guillermina en España |
- ¿Cuándo comenzó tu viaje? ¿Cuánto duró? ¿Tuviste la posibilidad de visitar otros países?
Comenzó el 27 de Marzo del 2015 hasta el 16 de Enero de 2016. Duró 10 meses.
Si, con padres alemanes viajamos a Croacia (Pula, Plitvicer Seen, Lovran, Banjole, Rovinj, Brijuni), Eslovenia (Ljubljana) y un poco de Austria e Italia. Luego viajé con unos amigos de Costa Rica a Belgican (Bruselas y Gante).
Y a la tierra de mis bisabuelos en España (Bilbao, San Sebastián, Pamplona, Alsasua y Urdiáin) con una prima de mi mamá
- ¿Dónde te alojaste en Alemania? ¿Cómo fue la experiencia diaria de convivir con una familia que no es la tuya?
Viví en Frankfurt am Main, con una familia anfitriona. Mi familia estaba formada por una mamá (30) y un papá (32). Tenemos una muy linda relación. Compartimos muchos momentos juntos. El idioma fue lo que más me costó adaptarme. Pero como los tres sabemos hablar inglés, el primer tiempo nos comunicamos por medio de este idioma y luego hablé en alemán.
- Guillermina, contame cómo era un día tuyo, tu rutina, lo que hacías para pasar el tiempo…
Los días de semana eran rutinarios, nos levantábamos a las 6.15 am, desayunábamos, y a las 7 caminaba a la parada del bus y de ahí a la estación de subte. Llegaba a la escuela a las 7.40. Mi escuela fue el Gymnasyum Max-Beckmann-Schule (nivel secundario con alto nivel de exigencia) aunque a mí no me calificaban. Cursé las siguientes materias: biología, matemática, inglés, alemán, química, historia y política. A partir de las 14 horas ya estaba libre para seguir con el curso de alemán (extra escolar) hasta las 17. Dos días a la semana jugaba a handball en un equipo de mi barrio. Paseaba por la ciudad. Me encontraba con amigos. Iba al bosque. Volvía a casa y me encontraba con mis papás. El fin de semana salía con mis padres o amigos.
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Amigas y familiares en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. |
- ¿Qué fue lo que más extrañabas?
Extrañaba la comida típica Argentina (moría por comer dulce de leche, alfajores, etc) La calidez de la gente Argentina. Si bien son amables y hospitalarios, hasta que no toman confianza son algo distantes. Aunque entrando en relación con ellos, conocí personas increíbles que nunca olvidaré.
- ¿Lo mejor que te dejó esta experiencia?
Esta experiencia me ha dejado muchas cosas positivas como: conocer y aprender culturas de diversos países. Poder valerme por mí misma. Conocer gente maravillosa con quienes continuo en contacto. Lo que he viajado. Y por sobre todo: tener siempre presente las ganas de seguir conociendo y aprender cosas nuevas. Saber que hay un mundo mucho más grande y diverso del que yo conocía, y el respeto por la diversidad cultural.
- ¿Y cómo sigue tu vida de ahora en más? ¿Vas a seguir estudiando?
Pienso seguir estudiando en el ITBA (Instituto Tecnológico de Buenos Aires) y hacer el curso de ingreso de ingeniería.
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Su familia y la bienvenida a casa |
- Contame tus sensaciones relacionados al regreso...
Fueron una mezcla de sentimientos encontrados. La felicidad de volver a mi país y encontrarme con familia y amigos. Y la tristeza de dejar Alemania, familia y amigos. Pero prometiendo un futuro reencuentro.
La joven, que egresó de la Escuela Secundaria Nº 6 de nuestra localidad, termina un año lleno de emociones, un tiempo que la ha preparado para enfrentar el futuro con una nueva mirada.