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| La obra de gas avanza hacia la ciudad cabecera. |
Vale la pena situarnos en la historia para comprender la realidad y en qué punto estamos en relación a la obra de gas para Banderaló.
En el año 1995 cuando asumió Alegre a la intendencia una de sus primeras declaraciones fue que traería el gas por medio de un gasoducto desde La Pampa. Pero el entusiasmo de su insipiente aprendizaje como intendente se disiparía muy pronto cuando se encontró con la negativa de sus pares pampeanos y el gas pasó a ser solo una aspiración o una promesa incumplida.
Banderaló tuvo una gran oportunidad de contar con gas GNC a través de una empresa provincial llamada Creces, el proyecto involucraba a todas las cooperativas y de esta manera los pueblos contarían con este servicio antes que la ciudad cabecera. La intervención del ex intendente Gilberto Alegre malogró aquel intento ya que, según sus propias palabras, ninguna empresa privada haría pie en territorio villeguense mientras él fuera intendente. Entusiasmó a dos cooperativas (Bunge y Piedritas) para que gestionaran la obra de gas desde provincia, hecho que finalmente ocurrió y de esta manera las demás cooperativas quedaron fuera del proyecto.
El tema gas en Banderaló no terminó allí. En el año 2009 la Presidencia de la Nación y la Municipalidad de General Villegas llamaron a licitación para el suministro de gas natural por red en Cañada Seca, Coronel Charlone y Banderaló. BAGSA presentó el 8 de junio de 2009 el proyecto ante ENARGAS solicitando la aprobación de inicio de obra bajo el Expediente ENRG Nº 14.908/09. Eso fue todo. El ex ministro de planificación De Vido fue preso, Alegre culminó su mandato y el proyecto quedó en el olvido.
El viernes 8 de marzo de 2019 el intendente Eduardo Campana inauguró el 74° Período Legislativo con el tradicional discurso del Ejecutivo. Allí, entre otros anuncio, destacó que “General Villegas tendrá gas natural por gasoducto, que llegará a todos los vecinos. Este logro no tiene antecedentes para nuestro partido, el gas dejará de ser de esta manera, un servicio para algunos privilegiados y se convertirá en una oportunidad para mejorar la calidad de vida de cada uno de ustedes.”
En la actualidad vemos cómo avanza esta obra que está en la etapa de soldadura y tunelado. Sabemos que va a quedar una boca de salida para que, en un futuro incierto, nuestra localidad tenga acceso a esta obra tan necesaria.
La pregunta es: ¿Estamos en condiciones de esperar otra vez? ¿Hasta cuándo debemos ser pacientes y callarnos a la espera de una promesa?
Les pregunto a la comunidad banderolense: ¿Veremos pasar la obra en silencio? ¿O seremos capaces de levantar nuestras voces para reclamar lo que nos pertenece como comunidad que integra el partido villeguense? Según expresaron desde el oficialismo no hay intención de realizar ningún proyecto para Banderaló hasta que finalice la obra en la ciudad cabecera.
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